Como cada año por estas fechas en la Costa del Sol vemos como muchos británicos y ciudadanos procedentes de otros países pertenecientes a la Commonwealth llevan en su solapa una amapola. ¿Te habías preguntado alguna vez el por qué?

Se trata de una costumbre que se remonta al fin de la Primera Guerra Mundial y la llevan en memoria de sus soldados muertos en combate.

La celebración del «Día de la Amapola» siempre se hace el segundo domingo de noviembre, aunque días e incluso semanas antes estas bonitas amapolas de papel se venden por todo el país. No tienen un precio fijo, se paga la voluntad y el dinero que con ellas se recauda va destinado a instituciones de caridad que ayudan a veteranos de guerra y a sus familiares.

¿Pero por qué una amapola y no cualquier otra flor? Todo se debe al poema del autor canadiense y participante en la Primera Guerra Mundial, John McCrae. En su famoso poema “Flander Fields” McCrae relataba como las amapolas crecían en los campos destruidos por la guerra junto a las tumbas de los soldados muertos.

En fin, en el Hotel Yaramar sabemos lo importante que es este día para la mayoría de nuestros clientes, por eso a través de esta entrada de blog queremos rendir un homenaje a todos esos valientes soldados que perdieron o pusieron sus vidas en peligro por luchar por su país.

Desde aquí esperamos que hayáis disfrutado de este post y esperamos que os haya servido para aprender algo nuevo. Y a ti  ¿Qué te parece esta bonita celebración?

Beatriz Muñoz
Atención al cliente